a sociedad civil europea ha logrado impresionantes victorias en su guerra contra los cultivos transgénicos. Siete países: Francia, Austria, Luxemburgo, Grecia, Hungría, Polonia y el mes pasado Alemania, han levantado moratorias a la siembra de la única variedad de maíz transgénico aprobada en Europa: el Mon 810, un maíz Bt de Monsanto, resistente a insectos. Italia tiene una prohibición general a todos los cultivos genéticamente modificados, mientras un referéndum en Suiza estableció en 2005 cinco años de moratoria en contra de los cultivos comerciales, que el gobierno decidió ampliar hasta 2013.
Las prohibiciones europeas han sido el resultado de la presión social sobre los gobiernos, y de la decisión autónoma de los ciudadanos, campesinos, agricultores y pobladores en general, de constituir por acuerdo voluntario regiones libres de transgénicos, que llegan a 196 este año.